miércoles, 18 de abril de 2007

EL PAÍS DE LOS PITUFOS

Ayer leí un artículo en la página de la BBC que decía que los daneses eran los más felices de Europa, bueno, para ser más exactos, los que más felices se creen de Europa.
Como muchos sabéis yo viví en Copenhague un año y puedo decir, por mi experiencia, que Dinamarca es un país peculiar. Tenía una amiga mitad danesa-mitad española que lo definía como 'el país de los pitufos' por ese espíritu ingenuo que reina entre sus habitantes, ajenos al mal, a la corrupción, a la suciedad, a la pobreza.
Me hizo gracia un comentario de un lector que decía que él también viviría feliz en un país rodeado de tías buenas, rubias y de metro ochenta...y es que es verdad, las danesas se salen. Salir a la calle en Copenhague era como sentarse en primera fila de Cibeles, un asco. con deciros que yo me crucé con Helena Christensen por la calle y pasaba desapercibida...
En Dinamarca no pasa nada, o casi nada, tengo un amigo periodista de la agencia EFE que se vuelve loco para encontrar noticias y el pobre siempre está deseando que en los sorteos de las competiciones europeas emparejen a un equipo español con uno danés o que una vez más le corten la cabeza a la sirenita...tengo mis dudas razonables de su implicación en el último degollamiento...la pobre...tan melancólica ella mirando al mar...pero es que a mi amigo le pagan por noticia contada, hay que entenderlo.
Para que os hagáis una idea de lo seguros que se sienten en su país os diré que cuando los papis de un bebé van a cenar a un restaurante dejan el carrito del niño fuera...¡con el niño dentro! Unos felices daneses se fueron de vacaciones a la Gran Manzana y no se les ocurrió otra cosa que hacer lo mismo..y casi desencadenan un conflicto internacional. Un policía que se encontró el carrito en plena calle se llevó al bebé a comisaría y cuando sus felices padres quisieron recuperarlo estaban acusados de abandono de un menor...lógico...pues tuvo que intervenir la diplomacia para explicar que es que eso en Dinamarca es normal...pero seguro que a los felices padres daneses no les quedan ganas de repetir experiencia...
Otra cosa que me llamaba la atención es la de aficiones que practican. Leí también que es el país europeo con más asociaciones por habitantes. Y me lo creo. Yo viví con un chico que tocaba la trompeta en una asociación, bailaba swing en otra asociación y escribía relatos cortos en otra...Creo que según la estadística tocaba a una asociación por cada 2 daneses...ver para creer...con tanto entretenimiento no les da tiempo a deprimirse, claro.
En Copenhague, como en el resto de las capitales europeas, también hay pobres. En concreto dos , y de diseño. Pensad en un mendigo, ¿cómo os lo imagináis? Más bien mayor, con su barba blanca, sus mitones, su carrito lleno de trastos, cerveza en mano...pues tal cual. Y creo que estos formaban parte de los que se auto-votaron como felices. Yo pasaba de darles dinero, corría la leyenda urbana de que estaban subvencionados por el gobierno, vete tú a saber.
Yo y dos amigas mías nos hicimos un viajecito de fin de semana largo por la Dinamarca profunda y eso ya fue el no va más. Primero nos alojamos en albergues varios donde compartíamos habitación y ¡oh sorpresa! la puerta no tenía llave...¿qué hacer? ¿cargar todo el día con las mochilas? ¿hacer turnos para vigilar el equipaje? Pues no, claro, arriesgarse y confiar en la buena voluntad de nuestros compañeros de estancia. Y no pasó nada, porque ya os lo digo, nunca pasa nada. Un día yo me olvidé el bolso en el tren, era un viernes por la tarde. Como si estuviera en España seguí el protocolo de rigor; cancelé tarjetas, llamé a la policía por si encontraban la cartera...¿y qué pasó? que el sábado a primera hora un amable y feliz danés me trajo el bolso a casa, intacto, que se había dado cuenta de que me lo había dejado atrás y lo cogió para devolvérmelo. Sin palabras, ¿no? pues así me quedé yo.
Bueno, sigo con el viaje. Con nuestra bicicleta (siempre la bici) recorrimos grandes superficies deshabitadas de paisajes paradisíacos pero nuestros anfitriones, muy hospitalarios ellos, dejaban cada kilómetro unos bonitos puestos de fruta ya pesada en sus bolsitas de papel, con el precio de cada bolsa y una hucha, sí, sí. Para que te sirvas y pagues, sin control, sin obligaciones, sin empleados con malas maneras metiéndote fruta podrida...ya sé lo que estáis pensando, que en España eso duraría dos telediarios...pues seguro...pero no me digáis que no es bonito, yo es que con estas cosas me emociono.
Y lo reconozco, me he aprovechado de su fe en la bondad humana, tengo que decir que durante el año que estuve por allí viajé gratis el 90% de las veces y hasta conseguí que el seguro de mi oficina me pagara unas gafas de 150.000 pesetas de las de antes aunque la culpa de la rotura fuera mía y sólo mía. Después de eso mi jefe ya se estaba planteando cambiarse las suyas...¡españoles!
Bueno, que me enrollo, dice el artículo que el secreto de la felicidad de los daneses es el no esperar gran cosa de la vida. Y puede que tengan razón. Probemos a bajar nuestras expectativas a ver si funciona. Y si no siempre nos quedará el sol. Que eso ellos ¡nin cheiralo!
BUEN DÍA Y SALUDOS A MARIU, MARÍA, MANOLO, ANXO...Y a todos los amigos que dejé por allá.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

que suerte tienen los daneses....Sorry por mi desparición de ayer, tuve un dia bastante fastidiado. el Lunes se murio mi perro que tenia 14 años y era de la familia, todos los q tengais o tuvierais en algun momento un can, sabreis lo que se siente....
A parte la semana pasada la obra fue como la guerra de Irak ( salvando las distancias... que pobres irakies) y ayer teniamos una reunion de empresa con toda la promotora para ponernos verdes, al final, fue al reves y salimos triunfantes, pero yo en medio de la reunion me eche a llorar ( y Maria sabe que eso no es tipico en mi...), esto ocurrio por la mañana, pero por la tarde tenia tal bajón que no estuve para nadie ( excepto para el dichoso proyecto de las viviendas de penedo)... Joer, casi q empiezo yo tb a escribir un blog y acabamos antes, no???
Bueno, que un besin a todos y q siento no haber escrito algun comentario ayer!!!
Lu

Anónimo dijo...

PERDONADA LU Y SIENTO LO DE TU PERRITO...Y DOY FE, NO ES TÍPICO DE TI PERO TODOS TENEMOS NUESTROS MOMENTOS DE DEBILIDAD, ¡GRACIAS A DIOS! BESITOS

Eva dijo...

Oye Lu, pues si tu escribes un blog yo me apunto a leerlo (me engancho fácilmente).
Siento lo de tu perro y a animarse...
Bicos

Eva dijo...

Maru,
se te olvidó contar una de las partes oscura de los daneses. Su relación con la higiene personal: los retretes en la cocina donde uno puede apenas sentarse, la ducha de quita y pon en el baño, esos tufillos que te hacen cambiarte de sitio en el autobús... Pero a lo mejor por eso son felices: acumulan una capa de suciedad que los hace inmunes a la tristeza!!!

-- Estoy generalizando, pero haberlos hailos y yo los he visto --

Eva dijo...

Creo que si estoy escribiendo en castellano tendría que haber escrito "haberlos haylos". Perdón por la falta de ortografía.

Eva dijo...

Si estáis interesados en el tema de calidad de vida, y leéis en inglés, este artículo está muy interesante:
Bienestar Infantil

Dinamarca - tercero
España - quinto
Reino Unido - último

Anónimo dijo...

Lu siento lo de tú perro, mi peque tb se llevó un gran disgusto cuando Pepito, su tortuga,la tortuga más chiquitina "decidió marcharse de casa a ver a su mami", la verdad que hoy la felicidad de los daneses se ve un poco ensombrecida, que les jodan a los daneses!!! Nosotros tb somos felices, a nuestra manera claro está, en España la felicidad es no dar, sino si puedo te jodo, anda que iban a durar mucho no digo la fruta en la carretera, digo directamente la hucha, jajaja, nin de coña, aquí el bolso no es q te lo olvidaras en el tren sino que directamente te lo han birlaoooo!!! Si te da un día por escribir un blog sobre el país de los mangantes, piensa en España, seguramente el resultado sea más simpático, con más anécdotas y titulares... jejeje ESPAÑA ES DIFERENTE !!!

Anónimo dijo...

Muchas gracias a todos por vuestros ánimos, la verdad es que hoy ya me siento mejor,aunque siga echandome a llorar si veo un cocker ruano por la calle, pero supongo que poco a poco lo superaré.
Al final me he decidido a empezar con el blog ( si pinchais en mi nombre accedeis)o bueno, en realidad a seguirlo, porque he retomado el que abandoné hace un año, verdad mary?, he dejado todo lo que escribi hasta entonces(por si a alguien le interesa) y voy a intentar escribir a menudo, gracias a Tanatos y la Maru, a la primera por animarme y a la segunda porque gracias a ella me ha dado envidia y he vuelto a escribir.
Un besin a todos