miércoles, 29 de enero de 2020

Embarazo natural a los 43 con baja reserva ovárica después de dos FIVs fallidas y una exitosa

No soy experta en SEO pero creo que esta entrada recibirá alguna visita más que las anteriores.

Cuando yo empezaba a asumir que nunca sería madre (y quien dice asumir quiere decir resignar) buscaba como loca en Google testimonios que me dieran esperanza, esas historias de embarazos imposibles y contra todo pronóstico. Y cuando las encontraba las leía y releía convenciéndome que eso también me podía pasar a mí. Y al rato me decía que no. Y al rato que sí. Y así iba tirando, de clavo ardiendo en clavo ardiendo.

Estoy siendo un poco dramática porque creo que mi historia no fue tan dura ni mi lucha contra la infertilidad tan agotadora pero sí lo suficiente como para ponerme en la piel del que haya encontrado esta entrada porque la estaba buscando.

Querida amiga, no te puedo decir que va a ocurrir, me niego a aconsejarte que el truco está en relajarse cargando un poco más sobre tu espalda una responsabilidad que no te corresponde. Pero me siento en el deber de comunicarte que hay veces que pasa, que el cuerpo humano es un misterio y va a su bola, y que fruto del empeño o fruto de la casualidad un día decide que es el momento para engendrar una nueva vida y da igual la edad, la condición, la frecuencia, la posición, lo que comas o lo que dejes de comer. Alguno de esos óvulos que te han dicho (literalmente) que "son muy feos" y de los que ya casi no te quedan, y ese espermatozoide que no es que vaya sobrado pero pone empeño se encuentran, y se gustan y hacen lo que tienen que hacer, y el resto del cuerpo les apoya y entre todos tiran p'alante.
Estoy casi de 6 meses y no dejo de alucinar.

Daría cualquier cosa por que te pasara a ti también. A todas las que lo quieren con todas sus fuerzas. Pero solo puedo contarte que me ha pasado a mí. Espero haberte hecho sentir un poco mejor. Os lo debía.